Podemos erradicar la pobresa y llegar más al necesitado, si la administración Distrital contará con más recurso, y esto se debe a la centralización que esxiste en Colombia, las ciudades y Distritos depende de los recursos que asigne el Gobierno nacional, así lo dio a conocer, el aclade Pumarejo durante su intervención, en La Cumbre Urbana de Bruselas.
De acuerdo a los últimos datos de seguridad alimentaria del Programa Mundial de Alimentos (WFP, por su siglas en inglés), Barranquilla, es la ciudad con el menor número de habitantes que padecen inseguridad alimentaria, entre las 5 grandes ciudades de Colombia, ratificando su apuesta por liderar procesos para derrotar la pobreza y la inequidad. Mientras que en Colombia el 30 % de la población padece de inseguridad alimentaria, en Barranquilla esa cifra es del 25 % de sus habitantes, manteniéndose por debajo de la media nacional.
De igual forma, según el DANE, Barranquilla cuenta con el mayor crecimiento económico y recuperación tras la pandemia. La ciudad sigue fortaleciendo su fuerza de trabajo y muestra de ello es el incremento en sus niveles de ocupación laboral, que son resultado de la apuesta de la Administración distrital en la generación de oportunidades para sus ciudadanos.
“Aunque somos un país muy desigual, nos está yendo bien, pero todavía hay demasiadas personas que caen en esa categoría”, detalló Pumarejo quien, además, explicó que parte de ese trabajo se enfoca en brindarles a las personas espacios públicos de calidad.
Precisamente uno de ellos es el programa Todos Al Parque, reconocido por el Prize for Cities de WRI como el proyecto más innovador en materia de desarrollo sostenible a nivel mundial, lo que le ha permitido tener espacios seguros de recreación, práctica de deportes y actividades culturales a minutos de sus viviendas.
“Lo que tenemos es un programa de calidad que toma los parques y los hace un programa de la comunidad, eso significa preguntarles a los ciudadanos qué tipo de parques quieren tener. Entonces, diría que la infraestructura pública mezclada con la construcción de comunidades es clave”, añadió.
Además, el alcalde Jaime Pumarejo atribuyó el éxito de su lucha al desarrollo de viviendas. Explicó que para esto se centran en que el crecimiento urbanístico de bajo costo no aleje a las personas de los barrios tradicionales, y que estos barrios se densifiquen para que no queden atrás.
Otro factor que destacó fue la preservación del medioambiente. “En esto estamos haciendo un gran esfuerzo, en construcción de resiliencia climática porque somos los que pagamos el más alto precio en la región ecuatorial por la crisis climática. Somos nosotros los que pagamos la cuenta: en vidas, en desplazamiento de personas, en migración climática y en costo fiscal por la infraestructura que tenemos que construir”, dijo el alcalde.
También explicó que se encuentran recuperando espacios naturales e invirtiendo recursos para convertirlos en sitios ecoturísticos para que las personas puedan aprovecharlos y, de esta manera, impulsar la economía de la ciudad y generar empleo.
De acuerdo con lo anterior, la ruta que ha trazado Barranquilla en los últimos 12 años hacia la equidad ha representado desafíos. Sin embargo, el mandatario señaló que ha sido una tarea en la que se ha puesto en primer lugar el trabajo conjunto con los ciudadanos para explicarles la hoja de ruta de los proyectos a largo plazo y, de esta manera, conseguir que se genere un feedback hasta llegar a un mutuo acuerdo.
Propuesta para brindar soluciones de vivienda y mejorar costo de vida
Otro de los temas abordados durante la cumbre fue el aumento del costo de vida, donde el alcalde Pumarejo conversó con sus homólogos que conforman el grupo de Champion Mayors, incluido el alcalde de Bruselas, Phillip Close.
En este punto, el alcalde Pumarejo insistió en la importancia de reducir las regulaciones en programas de vivienda. De acuerdo con el mandatario barranquillero, aunque el Gobierno nacional ha hecho un gran trabajo para proveer vivienda a las familias de bajos ingresos; hay que ser pragmáticos al momento de definir las nuevas zonas residenciales debido a que muchos de los proyectos de vivienda, que son adquiridos por jóvenes, están siendo ubicados a las afuera de la ciudad, dejando en los barrios tradicionales una población adulta sin capacidad de mejorar económicamente.
“Lo que necesitamos es encontrar una manera de densificar estos sectores tradicionales; ahora bien, son asentamientos informales que no tienen los permisos de tierras requeridos, y necesitamos dejar eso atrás y decirles: te doy un subsidio para que construyas un segundo, tercer y cuarto piso en tu vivienda, haces dos viviendas y puedes vivir ahí con tu familia”, indicó el alcalde, quien explicó que la calidad de vida de estas personas mejoraría ya que tendrían más cercanía a sus lugares de trabajo y a su familia.
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