El primer proyecto de decreto busca implementar un modelo de negociación colectiva sectorial, permitiendo que un solo sindicato negocie por todo un sector económico, obligando a empresas y trabajadores no participantes. Además, exigiría el pago obligatorio de cuotas sindicales para todos los empleados, y forzaría a las empresas a entregar información económica sensible sin respaldo normativo. Para Cabal, estas medidas reintroducen propuestas descartadas y afectan la libertad de asociación.
El segundo decreto reincorpora restricciones a la tercerización laboral previamente negadas por el Legislativo. Entre ellas, la presunción de ilegalidad en la tercerización empresarial, la imposición de límites a las Empresas de Servicios Temporales (EST) y la creación de sanciones encubiertas como suspensiones contractuales, cierre de actividades y vinculación obligatoria de personal. Según FENALCO, estas disposiciones penalizan esquemas legítimos sin habilitación legal.
El gremio también alertó que el Gobierno busca expedir estos decretos en un contexto institucional crítico, aprovechando la vacancia judicial y la cercanía de las elecciones, lo que dificulta el control por parte del Consejo de Estado y podría permitir la entrada en vigencia de normas sin sustento jurídico en un momento de alta sensibilidad económica.
FENALCO instó al Gobierno a suspender inmediatamente la expedición de ambos decretos y reiteró que cualquier reforma estructural al régimen laboral debe ser debatida en el Congreso, “único espacio legítimo para aprobar transformaciones de esta magnitud”. Cabal concluyó que el país necesita decisiones basadas en transparencia, rigor técnico y respeto por la institucionalidad democrática.
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