Cultura y deporte como motores del desarrollo: así lo reafirma el Caribe en el Foro OCDE 2025

Foto: Prensa Gobernación

Barranquilla, sede del Foro de Desarrollo Local de la OCDE, fue epicentro de una conversación clave para el sur global: cómo los acontecimientos culturales, deportivos y empresariales pueden convertirse en plataformas estratégicas para el desarrollo económico y social de los territorios.

El panel ‘Aprovechar los acontecimientos culturales, empresariales y deportivos mundiales para el desarrollo local’, realizado en el Centro de Eventos Puerta de Oro, contó con la participación del gobernador del Atlántico y presidente de la RAP Caribe, Eduardo Verano de la Rosa; el director del Carnaval de Barranquilla, Juan José Jaramillo; el gobernador de la Región Metropolitana de Santiago de Chile, Claudio Orrego; la secretaria ejecutiva para el Desarrollo Integral de la OEA, Kim Osborne; y la coordinadora de la Red de Ciudades del BID, María Camila Uribe. El diálogo fue moderado por Sérgio Guerreiro, director de Estrategia y Gestión del Conocimiento de Turismo de Portugal.

Un carnaval que cuenta lo que somos

El gobernador Verano destacó el poder transformador de la cultura cuando se construyen políticas públicas planificadas y consensuadas que integran el tejido cultural y deportivo al desarrollo territorial.

“Tenemos un carnaval de alta calidad, que no es fruto de la improvisación, sino de generaciones que han perfeccionado una narrativa que cuenta lo que somos y sentimos. Es una muestra que surge de la tierra, del corazón del pueblo”, señaló.

 

Verano enfatizó que gobernar implica también fortalecer lo simbólico, y por eso ha impulsado iniciativas que integran las expresiones culturales del Atlántico al Carnaval de Barranquilla, como los Negritos de Santa Lucía o los Burritos Corcoveones de Pital de Megua.

Infraestructura, turismo y economía popular

Además de lo cultural, Verano subrayó la recuperación de espacios públicos, la construcción de escenarios deportivos, el impulso a la gastronomía local y el ordenamiento del ecosistema de playas, como estrategias para fortalecer la economía popular y el turismo sostenible.

Destacó casos emblemáticos como:

• La Banda Departamental de Baranoa, símbolo cultural con proyección internacional.

• El Giro de Rigo, que reunirá a 10.000 ciclistas del mundo en el Atlántico.

• Punta Astilleros, playa rural reconocida entre las más bellas del mundo, que impulsa un modelo de turismo de contemplación sostenible, liderado por su comunidad.

“La clave está en escuchar a la gente y trabajar con ellos. Las políticas deben nacer del territorio”, afirmó Verano.

 

Y con humor, concluyó:

“Barranquilla es la casa de la Selección Colombia, eso dinamiza nuestra economía y, aunque lo intenten, ¡no se la van a llevar!”

 

El Carnaval como industria creativa

Juan José Jaramillo presentó cifras contundentes sobre el impacto del Carnaval de Barranquilla 2025:

• USD 220 millones generados en la ciudad.

• 193.000 empleos directos e indirectos.

• 800.000 turistas provenientes de 15 países.

• 15.000 artistas en escena.

“El Carnaval no solo es fiesta. Es empleo, identidad, cohesión social y transformación”, subrayó.

Experiencias internacionales y recomendaciones clave

El gobernador Claudio Orrego, de Santiago de Chile, compartió el caso de los Juegos Panamericanos 2023, que reposicionaron al país como destino internacional, generando inversión, infraestructura y políticas públicas robustas en torno a los grandes eventos.

Por su parte, Kim Osborne (OEA) y María Camila Uribe (BID) coincidieron en que la clave está en:

• Institucionalizar programas culturales y deportivos.

• Crear alianzas entre sector público, privado y comunidades.

• Trazar estrategias de promoción sólidas.

• Garantizar seguridad, sostenibilidad y servicios de calidad.