El incendio, que comenzó en la subestación eléctrica del edificio, se extendió rápidamente, afectando 16 vehículos y generando una situación de riesgo mayor, lo que obligó a una intervención inmediata del Cuerpo de Bomberos de Barranquilla con 12 máquinas y 45 unidades operativas. Gracias a esta labor, se logró la evacuación de 586 personas que habitaban 175 apartamentos.
Atención médica y monitoreo permanente
Un total de 45 personas fueron trasladadas a centros de salud, donde recibieron atención oportuna. Mientras tanto, los bomberos continúan haciendo monitoreo permanente, revisando piso por piso para garantizar que los niveles de vapores disminuyan y se den las condiciones seguras que permitan el reingreso de los propietarios a sus viviendas.
Desde la Oficina de Gestión del Riesgo del Distrito, se desplegó un equipo técnico que avanza en el censo de las familias afectadas, como parte de la atención integral a esta emergencia.
Torres A y B no deben ser habitadas
Las torres A y B del conjunto fueron las más comprometidas por la conflagración. La torre A presenta la mayor afectación estructural. El Cuerpo de Bomberos recomendó no habitarlas, hasta tanto se enfríen completamente y el equipo de la Oficina de Gestión del Riesgo pueda ingresar para evaluar daños internos y establecer acciones de mitigación que garanticen la seguridad de los residentes.
La administración distrital reitera su solidaridad con las familias afectadas y ratifica su compromiso para continuar acompañando a la comunidad en este difícil momento, con el apoyo de todas las dependencias institucionales.
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