Durante la jornada, se entregaron 24 cédulas físicas que fueron previamente tramitadas, y se inició el proceso para realizar el duplicado del documento a 37 internas. Esta acción no solo facilita la identificación de las mujeres privadas de la libertad, sino que también contribuye a su proceso de resocialización, permitiéndoles acceder a servicios y programas que requieren la presentación del documento de identidad.
La colaboración interinstitucional entre la Secretaría de Gobierno y la Registraduría Nacional se mantiene firme, con el objetivo de fortalecer los procesos de resocialización de la población carcelaria. La entrega de cédulas es un paso significativo para garantizar que las personas privadas de la libertad recuperen su identidad y sean reconocidas plenamente como ciudadanas, promoviendo así su integración positiva en la sociedad. Este tipo de iniciativas reflejan el compromiso de las autoridades locales con la rehabilitación y la restitución de derechos de la población carcelaria.
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