Un Atlántico con menos pobreza, más equidad y mayor proyección regional e internacional. 
Foto: Gobernación del Atlántico
Así lo ratifica el balance de gestión 2024 presentado por el gobernador Eduardo Verano de la Rosa, quien resaltó los avances históricos en la reducción de la pobreza multidimensional, pasando del 12 % al 9,5 %, una cifra que representa miles de familias que hoy tienen una vida más digna.
Durante su intervención en el Cubo de Cristal de la Plaza de la Paz, Verano enfatizó que esta transformación social es producto de una planificación iniciada desde su primer mandato en 2008, y que hoy se consolida con una inversión cercana a los $7,3 billones, gracias a la aprobación de 40 ordenanzas que soportan el Plan de Desarrollo “Atlántico para el Mundo”.
Los logros son integrales: en salud, se intervinieron 84 sedes médicas y se invirtieron $138.000 millones; en educación, ya se han otorgado 2.500 becas y se puso en marcha la carrera de medicina en la Universidad del Atlántico. En infraestructura vial, el departamento pasó de 80 km pavimentados en 2008 a 500 km hoy, incluyendo 120 de doble calzada.
El mandatario también destacó el impacto del megaproyecto Acueducto Regional del Norte, que transformará la vida de más de 1,6 millones de atlanticenses, y las acciones contundentes en seguridad, con cifras históricas como los carnavales más seguros de la última década y la drástica reducción de homicidios durante eventos claves del año.
Otro pilar del desarrollo ha sido el fortalecimiento del turismo y la economía popular: el Muelle 1888 y Salinas del Rey son ahora referentes internacionales, y más de 3.500 emprendedores han mejorado sus negocios con apoyo gubernamental. Asimismo, el programa ‘Mi Casa Bacana’ ha entregado 9.020 títulos de propiedad y proyecta 20.000 para 2027, además de 10.000 mejoramientos de vivienda y conexión gratuita a internet para 44.000 hogares.
Con orgullo, Verano recibió dos recertificaciones de calidad del Icontec, y reiteró su apuesta por la descentralización efectiva, avanzando en la conversión de la RAP Caribe en una Región como Entidad Territorial (RET), lo que permitirá a las regiones gestionar directamente sus recursos.
“El 8 de marzo de 2026 será una fecha histórica. No solo elegiremos Congreso, también diremos sí a una región con autonomía, con voz propia. Planearemos desde el territorio para el territorio”, concluyó Verano.
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